TRES ASPECTOS PARA ESTRUCTURAR UN ENSAYO
La
organización de todo trabajo intelectual depende del tema y del plano de ideas
en el cual se realiza la investigación. Los escritos que tratan diferentes
temas difieren conceptualmente entre sí, pero no formalmente. Un trabajo
académico producto de una investigación se compone de tres partes:
introducción, desarrollo o cuerpo del trabajo y conclusiones. Esta distribución
obedece, en primer término a que la estructura del trabajo es una unidad y, en
segundo a una necesidad lógica. La introducción, desarrollo o cuerpo del
trabajo y conclusiones son los elementos integrantes de una configuración
lógica, de una estructura. El ensayo como escrito académico no escapa a esta
división.
A
continuación se especifican los requisitos que deberá cumplir cada una de estas
tres partes.
LA INTRODUCCIÓN
La
finalidad de la introducción es el planteamiento claro y simple del tema que se
va a desarrollar, su importancia e
implicaciones, y la presentación sintética de los diversos aspectos que
componen el trabajo.
En
este primer apartado se ubicará el tema dentro de un contexto mayor, señalando
la intención del trabajo, sin límites, cualquier indicación sobre el material
así como la manera que se ha creído conveniente abordarlo.
Al
final de esta parte se expresará la tesis del ensayo. Ésta debe ser lo
suficientemente concreta, controversial, real y con cierto grado de veracidad.
“La tesis es la oración más importante del ensayo, establece el propósito,
coloca el tono, controla el nivel de abstracción”. Por esto se requiere que sea
enfática.
En
la introducción hay que señalar el sentido de la investigación, pero de ningún
modo anticipar ni el desarrollo ni las conclusiones.
Algunos
de los errores que se deben evitar son los siguientes:
v Afirmar que el tema elegido es interesante y
complejo ya que es evidente que si el tema no lo fuera de algún modo no valdría
la pena ocuparse de él.
v Mencionar asuntos que no tengan relación con el
tema.
v Incluir datos históricos, que desvían el tema a sus
antecedentes remotos, porque esto demora su descripción y análisis.
v El uso excesivo de ejemplos.
v Las seudo definiciones; es preferible dejar un
concepto sin definir antes que incurrir en un verbalismo sin sentido.
EL DESARROLLO O CUERPO DEL TRABAJO
Consiste en la presentación lógica, minuciosa y
gradual de los fundamentos del tema que se aborda.
El
desarrollo es, en esencia, la fundamentación lógica del trabajo de
investigación literario, histórico, científico o filosófico, cuya finalidad es
exponer y demostrar.
Formulada
una tesis –un problema- se desarrollan ciertos argumentos, cuya justificación
lógica se propone, y se llega a una conclusión. Por eso hemos dicho que el
desarrollo es similar al utilizado en matemática: demostrar una tesis.
El
desarrollo es por lo tanto la parte en la cual se justifica lógicamente la
tesis, puede hacerse por diversas formas: la intuición intelectual, la
dialéctica, la fenomenología o la deducción.
Dentro
de este apartado se pueden considerar tres momentos: la explicación, la
discusión y la demostración.
Este
es un orden paradigmático, pero no necesariamente puede ocurrir así.
La
explicación es el acto por el cual se hace explícito lo implícito. Claro lo
obscuro. Simple lo complejo. El desarrollo de un tema comienza, pues, con su
explicación. Explicar es desplegar el sentido de una noción, extenderla ante
los “ojos del espíritu” o de la mente; en otros términos, es analizar para
comprender.
Sin
embargo no hay ninguna explicación completa; más aún, toda explicación está, de
algún modo, abierta, porque es casi siempre parcial, condicional, aproximada,
instrumental y heurística. Es parcial porque sólo son tomados en cuenta algunos
de los factores que determinan un hecho, un fenómeno o una idea; es condicional
porque toda explicación es válida en cierto plano y aplicable dentro de ciertas
condiciones; es aproximada porque ni las medidas ni las cualidades consideradas
son exactas; es instrumental desde que la explicación produce un resultado por
el simple hecho de ser comunicada y, finalmente, es heurística porque es capaz
de promover y orientar investigaciones ulteriores.
Para
realizar una explicación se recurre frecuentemente a las definiciones. Por
definición se entiende el procedimiento que permite especificar el
significado de un término, mediante un
conjunto de palabras sinónimas que puedan sustituir al término definido.
Al
elaborar una definición se formulan las condiciones necesarias para la
aplicación de un término.
La
definición está limitada por la denominada
paradoja de la conceptuación que consiste en lo siguiente: para formular
una buena teoría se necesitan conceptos rigurosos, pero para alcanzarlos se
necesita una buena teoría. Esto resulta evidente a poco que se piense en que al
aumentar nuestro conocimiento de un tema, la concepción de dicho tema cambia
paralelamente pero, a la vez,
cuando manejamos conceptos más precisos crece nuestro pensamiento.
La
precisión conceptual se logra a través de un procesos aproximativo de
definiciones sucesivas, esto permite una doble retroalimentación: el estudiante
al enriquecer sus conceptos mejora sus teorías y viceversa.
La
discusión es considerada como un momento dialéctico l cual consiste en examinar
dos tesis opuestas con la finalidad de decidirse por alguna de estas opciones:
rechazar una y aceptar la otra, en esta opción las proposiciones suelen ser
contradictorias por lo tanto son incompatibles; rechazar ambas, ya que ambas
pueden ser falsas, pero no verdaderas las dos; o bien decidirse por una
solución complementaria (síntesis). No existe oposición entre las tesis, existe
una relación de complemento que propicia la síntesis. Esta opción representa un
esquema dialéctico, tesis, antítesis y síntesis.
La
discusión se presenta cuando las tesis se excluyen por ser contradictorias. En
este caso se debe analizar primeramente la tesis que se ha de rechazar (probada
como falsa) y luego la que se adoptará (probada como verdadera). El orden de
esta argumentación no es lógico sino psicológico, porque al hacerlo a la
inversa, la mente humana tiende a aceptar lo que se le presenta en último
término.
Desde
un punto de vista lógico estricto, y siempre que valga la aplicación del
principio (ley) del tercero excluido, basta destruir una tesis para pasar a su
contradictoria: ese es el fundamento lógico de la demostración por el absurdo.
Desde el punto de vista de la solidez de la argumentación, conviene extraer
razones de la primera para la enunciación de la tesis final. Así, pues, la
marcha del razonamiento sería:
a. Examen de una tesis y análisis de los argumentos que
la sostienen.
b. Demostración de la falacia de esos argumentos.
c. Necesidad de enunciar la tesis final como consecuencia de la bancarrota de la
primera
La
demostración de una tesis, como ya se mencionó anteriormente, es el fundamento
lógico del desarrollo, su esencia, su razón de ser.
En
un ensayo académico como en cualquier tipo de trabajo de investigación, la
esencia reside en el ejercicio del
razonamiento y esto viene a ser la deducción, por consiguiente la demostración
es un caso particular de la deducción.
Se
debe tener presente al elaborar el ensayo que la base de todo trabajo de
investigación es una idea central; y aunque se manejen ideas secundarias no hay
que perder de vista el objetivo del trabajo. Asimismo la naturaleza del tema no
debe incidir en la estructura lógica de las argumentaciones; hay que recordar
que todo trabajo de investigación es un ejercicio de lógica y se deben
demostrar las ideas y opiniones con razones, no con verbalismos.
Finalmente
se debe considerar que el investigador antes de estructurar el escrito se
encuentra en un contexto de descubrimiento y al ir desarrollando su trabajo
inicia el contexto de justificación. Esto implica que al elaborar las
argumentaciones se debe observar si éstas han sido justificadas lógicamente.
Esta sistematización lógica debe exponer en primer término las causas y los
principios, posteriormente los efectos y las consecuencias.
Dicho
de otra manera el ensayo como producto de un trabajo académico y de acuerdo con
la problemática seleccionada por el estudiante puede incluir además de lo
anterior:
v La descripción de ciertos hechos o fenómenos.
v La exposición de un tema. La exposición incluye
descripción, narración y argumentación.
v La expresión de opiniones personales.
v El análisis reflexivo de lecturas.
v Comentarios relacionados con los textos.
v Comparación de elementos teóricos de algunos
paradigmas, posiciones pedagógicas, psicológicas e ideológicas.
Sin
embargo, existen algunos puntos que se deben evitar en la elaboración de este
tipo de trabajos.:
v Las ideas secundarias que propician la desviación
del tema central.
v El verbalismo que intenta persuadir con ideas sin
fundamento.
LAS CONCLUSIONES
Las
conclusiones al igual que la introducción y el desarrollo, posee una estructura
propia. Esta parte debe presentar
características de una síntesis sobre la argumentación, las pruebas, los
ejemplos, la exposición y los razonamientos expresados en las dos primeras
partes del trabajo.
Otra
de sus funciones consiste en relacionar las diversas partes de la
argumentación, unir ideas desarrolladas, en este sentido se dice que las
conclusiones son un regreso a la introducción, porque se cierra sobre el
inicio, al expresare nuevamente la tesis manejada anteriormente.
Esta
parte guarda una estrecha relación con la demostración de la tesis. Las
conclusiones se deducen lógicamente de los razonamientos expuestos.
Para
complementar, esta parte deberá entrever un planteo general sobre un futuro
desarrollo de las ideas formuladas en las conclusiones. Todo lo anterior ofrece
al lector la impresión de un escrito integrado y armónico.
Conviene
aclarar que no es necesario encabezar las diferentes partes con los títulos de
INTRODUCCIÓN, DESARROLLO, CONCLUSIONES, es suficiente con que cada parte cumpla
con las características mencionadas.
Por
último se mencionan algunas consideraciones que se deben tener en cuenta al
estructurar un ensayo académico.
Si
bien el ensayo se apoya en ideas ajenas, el conjunto de razonamientos y
exposiciones deben ser un producto original.
El
abordar un tema o problema exige su conocimiento amplio.
Las
ideas que se utilicen deben tener una relación directa con el planteamiento o
juicio a demostrar.
La
disertación debe hacerse con naturalidad, precisión, coherencia y corrección.
La
validez de las explicaciones y argumentaciones están consideradas en la
inclusión de citas textuales y notas de pie de página, así como la bibliografía
que se consulta.
Es
necesario recordar, que además de lo anterior, la presentación formal requiere
la portada del documento.